Si hay algo que nunca pasa de moda es el rouge de labios. "Me es imposible escoger un rojo", todos me encantan.
Se llevan en toda su gama: rojo clásico, oscuro, grosella, sangre. El acabado de moda es el natural, "pero jugoso: ni excesivamente brillante ni demasiado mate".
Lo primordial es que nuestros labios se vean hidratados y cuidados. Para conseguirlo la textura de la barra juega un papel primordial.
Se puede usar en barra o en crema, pero siempre que se deslice a lo largo del labio y sea de larga duración.
Yo le suelo poner un poco de brillo en la parte del medio del labio, intentando lograr algo un poco más sexy, unos labios húmedos. Este resultado será perfecto, si hidratamos el labio, luego lo perfilamos con el mismo color del labial, luego rellenamos con el color que vayamos a utilizar y para fijar hay que recurrir al viejo trucó de presionar los labios con un pañuelo de papel y volver a pintarlos encima, así durarán mucho más.
¿Todo el mundo puede lucir unos labios rojos?
Si. La clave es elegir el tono adecuado según el color de la piel.
Las personas con un color o de piel cálido (marrón, verdoso, ligeramente amarillo...) están más favorecidos cuando se maquillan los labios con un color naranja, coral o rojo Ferrari.
Las pieles más frías (blancas o incluso azuladas) están mejor con el labial en rojo sangre, granate o incluso fucsia.
Aquí les dejo distintos tonos de piel, con labiales rojos. Espero les guste.
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